Cuando los sonidos son seleccionados y mezclados con cuidado podemos crear maravillosas melodías, pero también poderosas herramientas terapéuticas y de transformación personal.
Existen tecnologías de sonidos diseñadas para ser utilizadas como medios alternativos de tratamiento, o como medicina complementaria a terapias tradicionales. Esta tecnología de sonido es capaz de ayudarnos a aliviar el dolor, reducir el estrés y ampliar nuestras capacidades mentales. Problemas como el insomnio, que está íntimamente relacionado con pérdida de memoria, depresión, aumento de peso y enfermedades y trastornos mentales severos, pueden ser eficazmente tratados con tecnología de sonido y sin los afectos secundarios de los medicamentos.
Esta efectiva terapia se desarrolla mediante el uso de sonidos binaureales. Estos son sonidos que al ser escuchados crean ciertos grados de sincronicidad en el cerebro. Los sonidos binaurales fueron descubiertos en el 1839, pero fue el Sr. Robert Monroe quien en el 1956 decide crear un centro para la investigación y el desarrollo de la tecnología de sonido. Por más de cuarenta años, el Instituto Monroe se ha dedicado a estudiar, refinar y patentizar tecnologías de sonido capaces de llevar a nuestro cerebro a distintos estados de conciencia. El reconocido médico de familia, emergenciólogo, médico ocupacional, autor de varios libros, Master Reiki y ex Director Médico de la Administración de Veteranos, el Dr. Serguey Sorin, en sociedad con el Dr. Brian Dailey, pionero en la utilización de sonido para asistir a pacientes de cáncer, creado por el Sanvit Wellness, entidad que se dedica a desarrollar programas educacionales para cuidadores, profesionales de la medicina y servidores médicos. Este Instituto busca educar y ofrecer otras alternativas a los problemas de salud entre ellas, las terapias de sonido.
Podemos sincronizar a voluntad nuestro cerebro en cualquiera de estas ondas para obtener grandes beneficios tales como la eliminación del dolor, descanso, aprendizaje rápido, concentración, creatividad y reducción de estrés. Incluso, nuestro cerebro puede regenerarse de traumas debido a un proceso llamado neuroplasticidad, que, como explica el Dr. Sorin: “No solo somos capaces de desarrollar nuestro cerebro, sino también podemos, de forma natural, reorganizar sus funciones creando más conexiones neuronales. El hecho de que podemos utilizar las frecuencias de sonido de manera eficiente y dirigida a que podamos seleccionar nuestras ondas y estados cerebrales, nos permite como individuos ser el conductor de nuestra propia vida y no el pasajero”.
- Nuestro cerebro emite distintas ondas, como por ejemplo:
- Gama actividad mental de alto nivel, toma rápida de decisiones y supervivencia
- Beta concentración y excitación
- Alpha relajación sin sueño, estado meditativo
- Theta estado meditativo profundo, hipnosis
- Delta Sueño profundo, inconciencia
Esta tecnología de sonidos que sanan y talleres sobre su uso está disponible en PR gracias al trabajo de Mc2.
