Aun cuando por siglos, en países como Perú, Ecuador, Colombia y Brasil se hace uso de este brebaje, su descubrimiento y uso es un misterio. No sabemos cómo surgió la combinación y la cocción de estas dos plantas en una selva con aproximadamente 80,000 especies de plantas de las cuales 10,000 pueden ser lianas, y donde prácticamente todas las plantas tienen hojas.
Esta psicoactiva bebida ceremonial ha despertado el interés de médicos, neuro biólogos y exploradores de la consciencia, pues está científicamente comprobado que las drogas psicodélicas tienen potencial terapéutico para tratar la ansiedad, la depresión y otras afecciones.
El uso de la Ayahuasca es una experiencia profundamente personal, individual y de gran contenido espiritual, y el pueblo amazónico lo considera un sacramento religioso.
Utilizado en ceremonias chamánicas para hacer trabajo introspectivo y comunicar con Dios u otros espíritus, su uso se ha extendido fuera de la selva a iglesias de corte cristiano ecléctico, como el Santo Daime, que ha hecho la ayahuasca parte de sus ceremonias y sacramentos.
Este brebajeíntimamente relacionado con el tercer ojo permite a quien lo toma acceder a diferentes estados o planos de consciencia. Su agente activo, el DMT, uno de los alucinógenos más poderosos conocidos y que también es liberado por la glándula pineal en el interior de nuestro cerebro, impacta a quien lo toma de manera física, emocional, intelectual y espiritualmente.
Aun cuando ni la Ayahuasca ni el Zolof u otros antidepresivos van a hacer desaparecer los problemas mágicamente, muchos le confieren al oscuro brebaje una extraordinaria habilidad para sanar nuestras relaciones con los demás. La poderosa medicina no es un sanador en sí misma, sino un expansor de la consciencia que te muestra cómo sanarte a ti mismo.
El psico-náutico viaje a nuestra oscuridad producido por esta antigua bebida de la selva puede provocar insoportables nauseas y vómitos, pero aun así, su capacidad detransformar significativamente algunos aspectos de la vida sigue haciendo de este enteógeno la medicina de muchos pueblos.