Durante toda la adolescencia y una gran parte de esos primeros años de joven adulto, me sentí totalmente perdido en la mayoría de las áreas de mi vida.
Sentía que no encajaba a nivel social, ni familiar. No tenía idea de lo que haría con mi vida, y ni siquiera reconocía mis cualidades. Mis habilidades para relacionarme exitosamente con el sexo opuesto eran peores que las de Don Ramón cuando trataba de comunicarse con Doña Florinda, y lo peor de todo era que ni yo mismo me entendía o me quería.
Sin embargo, hace unos doce años, gracias a unos buenos amigos que me dieron la mano tras verme caer en un fondo bastante profundo, decidí adentrarme en un taller de rediseño personal que comenzó a cambiar mi interior para siempre y con eso, todo lo demás alrededor de mi vida. Ese evento puso en marcha una pasión por buscar la información que me diese las respuestas de cómo podía crecer como hombre hasta llegar a ser la mejor versión de mí mismo.
El proceso ha sido una aventura intensa, llena de retos. No ha sido fácil, pero a la larga todo ha sido progreso y ganancia. Hoy puedo decir que siento y veo ese éxito que tanto anhelé. El secreto estuvo en esa búsqueda incesante de información, combinado con la disposición de verdaderamente escuchar más de lo que hablo y responsabilizarme por los resultados obtenidos, al reconocerme como fuente principal de ellos. Vivimos en un momento de la historia en el que la información que necesitamos para avanzar está al alcance de un "click". Sin embargo no utilizamos esa herramienta lo suficiente. O al menos, no la utilizamos para buscar la información que nos puede hacer salir del hoyo. Además, muchas veces estamos cerrados a darnos la oportunidad de explorar nuevos métodos que nos conduzcan al éxito que anhelamos. Pretendemos que todo funcione trabajando con los mismos patrones que nos han llevado a siempre acabar en el mismo sitio.
Pero piénsalo... Si un equipo de baloncesto está perdiendo por 25 puntos a la mitad de un juego, ¿cuáles son las posibilidades de que gane utilizando la mismas estrategias ofensivas o defensivas? Vamos un poco más allá, ¿cabrá la posibilidad de que el problema sea solo de los jugadores, o el dirigente tendrá gran parte de la responsabilidad? Albert Einstein dijo: "La locura está en pretender obtener resultados diferentes haciendo siempre lo mismo". Como hombre y ser humano quisiera pasar las recetas de lo que me ha funcionado a otras almas que buscar vivir al máximo este plano físico. Esa es la razón por la que escribo este artículo y me aventuro en la creación de mi blog Up•Turn.
5 tips para salir del estancamiento y comenzar a ser la mejor versión de ti mismo.
- ¡Ríndete! El concepto de la palabra rendición no necesariamente es negativo. El hecho de que siempre queramos hacer las cosas a nuestra manera o bajo las condiciones que nos gustan es la principal razón de no avanzar. Peleamos para que todo sea en nuestros términos y esto es lo que no nos permite descubrir el mensaje que trae esta maestra vida. Al igual que Daniel San no podía entender la enseñanza que el Sr. Miyagi le brindaba como parte de su entrenamiento en karate, cuando le ordenaba pintar la cerca, lavar los autos o lijar el piso. Una persona muy sabia me dijo una vez: “El maestro aparece cuando el estudiante está listo".
- "Vacía tu jarra de agua". Nuestra mente funciona igual que un disco duro. Es un dispositivo que se va llenando de información a medida que vamos experimentando el mundo. Sin embargo, mucha de esa información es como agua sucia llenando una jarra hasta el tope. Entonces, si esa jarra es nuestra mente, ¿habrá manera de poder llenar esa jarra con agua limpia sin haber botado el agua sucia que tiene? Es obvio que hay que deshacernos de todo ese sucio para lograr nuestro objetivo. Para lograr éxito, hay que cambiar el paradigma. ¿Qué significa el deshacernos de lo que creemos saber hasta el momento? Es aventurarnos a lo desconocido.
- Los cuatro acuerdos. En su libro "Los 4 acuerdos", Don Miguel Ruiz sugiere un pequeño procedimiento que podemos incorporar en nuestra vida para ayudarla a que sea una llena de éxito. El procedimiento presenta cuatro sencillas guías que nos recuerdan la oportunidad y el derecho de tomar las riendas de nuestra vida y vivirla plenamente. Además, el deshacernos de viejas creencias heredadas que nos limitan como seres humanos.
- "Sé impecable con tus palabras”. Utiliza las palabras apropiadamente. Empléalas para compartir el amor. Usa la magia blanca empezando por ti.
- "No te tomes nada personalmente". Respecto a la opinión ajena, para bien o para mal, mejor no depender de ella. Esa es otra película.
- "No hagas suposiciones”. Nunca nada que pasa fuera es personal. Pero en cualquier caso, no saques conclusiones precipitadamente.
- "Haz siempre lo máximo que puedas". Verdaderamente, para triunfar en el cumplimiento de estos acuerdos necesitamos utilizar todo el poder que tenemos. De modo que, si te caes, no te juzgues. No le des a tu juez interior la satisfacción de convertirte en una víctima. Simplemente, empieza otra vez desde el principio.
Recomiendo la lectura de este libro, que ha sido de gran utilidad en mi proceso de crecimiento.
- "Dime con quién andas y te diré quién eres". Alguna vez leí que somos el resultado de los libros que leemos, los cafés que disfrutamos, los viajes que hacemos, las conversaciones que tenemos y las personas a las que amamos. Lo que quiero decir con esto es que la información llega con la exposición. Cuanto más rompemos el miedo a la exposición, más información y soluciones llegan. De ahí podemos escoger lo que nos funciona y lo que no. Rompe el pensamiento de que las personas o las cosas son buenas o malas sin tener toda la información. Innegablemente podemos decir que por principios naturales existen las cosas que funcionan y las que no funcionan (que para todos pueden ser diferentes o variar). Pero, ¿cómo saberlo o expandir el conocimiento si el miedo sobrepone a la exposición a nueva información?
- "Vive hoy, vive presente, vive en el momento". La culpa es vivir en el pasado. El pasado es algo que ya sucedió, no puede ser cambiado. Sin embargo vivimos metidos en la culpa, lamentándonos por lo que no podemos cambiar y perdiendo la oportunidad de hacer algo espectacular con relación a lo que tenemos de frente que es nuestro presente. Este es el lienzo de lo que será nuestro futuro y se convertirá en el diario del pasado bonito que podríamos leer algún día. El hábito de vivir en el presente tiene que practicarse. Los ejercicios de meditación o "mindfullness" se enfocan en entrenar nuestra mente para permanecer en el momento. Es como ir al gimnasio o estudiar para una materia. Si queremos lograrlo, existen maneras de moldear nuestro cerebro para tener éxito. El poder está en la información y en la apertura para internalizarla. Te invito a empaparte de ella para convertirte en la mejor versión de ti mismo